Los miedos siempre están en el futuro. El miedo compulsivo en una persona puede provocar un bloqueo en las sanaciones, lecturas y manifestaciones. A veces, cuando nos manifestamos por algo, nuestro miedo lo bloquea o incluso crea aquello que tememos. Cuando nuestras habilidades intuitivas comienzan a acelerarse, el miedo es el mayor peligro para la persona que utiliza oraciones manifestantes. Es posible que una persona haga realidad su mayor miedo.
El miedo hace que nos quedemos en nuestro espacio y bloquea nuestras capacidades para sanar y ser sanados. Es lo único que nos impide acceder al Séptimo Plano de Existencia. Por un lado, quieres manifestar algo, pero tus miedos lo bloquean. Por otro lado, puedes crear aquello que es tu mayor miedo.
Si la persona intuitiva le diera tanto poder al amor, la luz y el equilibrio como lo da al miedo y al odio, habría poco o ningún autosabotaje. La persona intuitiva debería reconocer cuánta influencia pueden tener los pensamientos en su vida. Los programas de miedo también pueden transmitirse a través de los genes o de los niveles históricos de una persona. Tire, cancele, resuelva y reemplace energías según sea necesario. Es importante separar los “programas de miedo” de la emoción natural de “miedo” que una persona necesita para funcionar como ser humano.
Existe una respuesta natural al miedo que una persona necesita para funcionar en tiempos de emergencia. Es importante separar el “programa del miedo” de esta respuesta de emergencia natural.
Los programas de miedo ocupan mucho espacio y cuando hay exceso de miedo se producen problemas en las glándulas suprarrenales y en los pulmones. Al realizar el Trabajo de Creencias sobre tu mayor miedo y profundizar, podrás liberarlo y mejorar tus habilidades intuitivas. Recuerde que cuando trabaje con el miedo, siga el escenario preguntando por qué este sentimiento surgió, cómo sucedió, y cuando ocurrió.
Uno de los mayores temores es decepcionar a Dios. Junto con esto muchas veces viene el temor de no terminar nuestra misión para Dios. También puedes probar los programas “Dios me odia”, “Dios se ha apartado de mí” y “Temo a Dios”. Todos estos son temores equivocados acerca de Dios. A medida que liberas tus mayores miedos, liberas bloqueos que te impiden sanar y manifestarte.
